Dos
animales salvajes se reconocen al instante…
Nuestras
miradas explorándonos detenidamente, perfilando nuestra silueta que
se recorta en las tenues luces que iluminan el club liberal.
Te
observo bailando divertida entre un grupo de chicos. Sabes moverte, y
atraer miradas. Me gustas, eres de las mías.
Estoy a dos escalones por encima de ti, buscando un hueco entre la gente.
Me
sonríes, te sonrío y mmm la puerta abierta de par en par..
Nos
acercamos sin dejar de movernos, dejándonos envolver por el éxtasis
del momento, enzarzadas en una demostración de habilidades, de la
que no sólo somos testigo nosotras…
El
contacto con tu piel húmeda estimula aún más mi apetito…
Tus
ojos centellean en la oscuridad. Mi muslo se abre camino entre tus
piernas, mientras bailamos pegadas, frotándonos, acariciándonos,
rozando nuestra intimidad con descaro.
Ellas
nos fulminan con la mirada. Ellos nos miran divertidos, creyendo que
es tan sólo un juego calienta braguetas…
Y
lo es, sólo que son las nuestras las que calentamos….¿verdad
niña?
Media
vuelta, y mis glúteos en contacto con tu pubis. Me abrazas por
detrás, mientras nuestras caderas se mueven perfectamente
sincronizadas. Te rodeo lentamente situándome frente a ti, tomándote
del pelo con una mano, echando tu cabeza hacia atrás.
No puedo
esperar, me urge pasar a mayores.
Mis
labios rozan tu cuello, tu boca se abre dejando escapar un
suspiro
Miramos
a nuestro alrededor, coges firmemente mi mano y desaparecemos rápida
y discretamente camino a los baños…
Te
empujo dentro y paso el cerrojo…
Locura,
los impulsos se manifiestan libres sin censura. Nuestra respiración
agitada. Gotas de sudor perlando nuestro escote y tus manos inquietas
colándose por la cinturilla de mi pantalón. Tu tacto suave, húmedo,
caliente. Tu lengua…. Mmm ágil, delicada y golfa
Tu
pie apoyado en la taza, y mi lengua buscando tu calor, saboreando tu
sabor salino, haciéndote perder el equilibrio. Apoyas tu espalda en
las baldosas de las paredes , que destilan un vaho húmedo y
caliente.
Nuestros
gemidos se escuchan al otro lado de la puerta?
Que
más da. Las golfas no tienen vergüenza por tomar un aperitivo.
Salimos
del baño. Tu sabor en mi boca, tu olor impregnado en mi piel, en mis
labios, en mi barbilla. Nos guiñamos cómplices un ojo, mientras nos
inclinamos en el lavabo y nos lavamos la cara sonriendo descaradas.
Secamos el exceso de humedad, y nos fundimos en un beso largo,
intenso, caliente….
Un
toque de barra de labios. Y salimos del local...esta noche continuaremos nuestro juego con todo lo que nos gusta aceites y lubricantes, afrodisíacos, juegos en pareja, juguetes xxx, lencería ...